El grupo minero sueco Boliden será uno de los primeros del mundo en empezar a utilizar camiones eléctricos para el transporte minero pesado a partir de este año. Se trata de vehículos que ofrecen varias ventajas importantes en entornos subterráneos como la ausencia de emisiones de gases de escape, un lugar de trabajo más seguro con condiciones de trabajo más silenciosas.
En la actualidad, la industria minera atraviesa un período de rápidos cambios, en el que muchas empresas están adoptando métodos de producción más sostenibles para producir metales con una menor huella climática. En las minas de Boliden, al igual que en muchas otras, los gases de escape de los vehículos diésel son responsables de la mayor parte de las emisiones de dióxido de carbono.
Gracias al nuevo acuerdo de cooperación entre la empresa metalúrgica Boliden y Volvo Trucks, se utilizarán dos camiones Volvo eléctricos pesados en la mina Kankberg de Boliden, situada a las afueras de Skellefteå, en el norte de Suecia. Si todos los camiones de la mina fueran eléctricos, sus emisiones de CO2 podrían reducirse en más de un 25%.
“Es una colaboración emocionante en un entorno con unas exigencias muy difíciles, como pendientes pronunciadas, cargas pesadas y un aire húmedo que desgasta en los vehículos”, explica Jessica Lindholm, jefa de proyecto de Volvo Trucks. Y resalta: “La colaboración con Boliden nos proporcionará valiosos conocimientos sobre el rendimiento de los camiones eléctricos cuando se conducen bajo tierra y nos ayudará a responder a importantes preguntas sobre cómo se ven afectadas las baterías y la transmisión. Gracias a esta reducción de las emisiones de dióxido de carbono en el transporte minero, también reduciremos indirectamente nuestras propias emisiones de CO2, ya que nuestros camiones utilizan materias primas provenientes de la industria minera”.
El primer camión que dará servicio a la mina de Kankberg, un Volvo FH Electric, se utilizará para transportar materiales y equipos al interior de la mina. La experiencia con este primer camión servirá de base para poner en funcionamiento, posteriormente, otro Volvo FH Electric que se utilizará para el transporte subterráneo de rocas y minerales.
“Vemos la colaboración con Volvo como una gran oportunidad para impulsar el uso de la tecnología eléctrica y, al mismo tiempo, aprender a adaptar nuestras operaciones para una transición al transporte subterráneo sin combustibles fósiles. Una de las principales ventajas de los camiones es que contribuirán a una mina más sostenible, tanto en lo que respecta a las emisiones como al entorno de trabajo de nuestros empleados”, comenta Dennis Forslund, jefe de Proyecto de Boliden.
Y agregó: “Además, la cantidad total de energía consumida en la mina será menor, ya que la propulsión eléctrica es más eficiente que un motor diésel desde el punto de vista energético, y permite aprovechar la electricidad regenerada al frenar el motor en pendientes descendentes”.
Volvo Trucks ofrece una amplia gama de camiones eléctricos, la que incluye seis modelos de camiones eléctricos fabricados en serie. Los camiones eléctricos de la empresa son capaces de cubrir numerosas necesidades de transporte, desde la eliminación de residuos y la distribución urbanas hasta el transporte de mediana distancia y la construcción. El objetivo de Volvo es que el 50 % de los camiones nuevos que venda en 2030 sean eléctricos.