El sector marítimo y fluvial brasilero se reunió en Brasilia, para discutir nuevas medidas de gestión medioambiental
De acuerdo con la Confederación Nacional de Transporte (CNT), entre los modos de transporte, la vía fluvial es reconocida por tener menores emisiones de dióxido de carbono, gas generador del efecto invernadero, especialmente para el movimiento de cargas en larga distancia. Para tener una idea, detalla que una barcaza de cinco toneladas lleva la misma cantidad de productos que 143 camiones de 35 toneladas cada uno, o el equivalente de 72 vagones de 70 toneladas.
Pero la industria tiene desafíos para mejorar la gestión del medio ambiente y reducir los impactos de la actividad. El tema fue discutido el 29 de septiembre, durante el 2º Seminario de Sustentabilidad Ambiental en el Transporte Fluvial, promovido por la Asociación Nacional de Transporte Fluvial (ANTAQ), en colaboración con la Confederación Nacional del Transporte (CNT).
En la apertura del evento, el director ejecutivo de la CNT, Bruno Batista, puso de relieve la importancia del tema en la agenda del sector transportista. Según él, desde 1996 la entidad desarrolla acciones para reducir los impactos ambientales del transporte, trabajo que se ha fortalecido desde 2007, con la creación de Despoluir – Programa Ambiental de Transporte, en colaboración con el SEST SENAT. A través de el, fueron realizadas más de 1,8 millones de medidas ambientales en los vehículos de transporte por carretera de carga y pasajeros. “Con la consolidación de Despoluir, el objetivo es ampliar a otros sectores. Entendemos que la vía fluvial tiene un gran potencial. El nivel de eficiencia energética es mejor que el de otros modos. Entonces, tenemos que seguir adelante”, dijo.
De acuerdo con el director general de Antaq, Adalberto Tokarski, la agencia acompaña y controla la gestión ambiental de las instalaciones portuarias en Brasil a través de la IDA (Índice de Desempeño Ambiental), establecido por una resolución en 2012. El índice permite “cuantificar y simplificar la información, con el fin de facilitar la comprensión de los responsables públicos y de los tomadores de decisión sobre las cuestiones ambientales portuarias “, esclareció.
Antaq analiza 38 indicadores, divididos en cuatro categorías: económicos-operativos, sociales y culturales, físico-químicos, y biológicos-ecológicos. La encuesta dio origen al Premio Antaq de Sustentabilidad Portuaria, que reconoce los tres puertos organizados que obtienen los mejores resultados en la IDA.
Tokarski señaló que la aplicación de la IDA aprovechó la preocupación por los temas relacionados con el medio ambiente en las terminales. “Hay una dificultad de recursos de las autoridades portuarias para aplicar determinadas medidas. Pero con la AIF, se percibió que comenzarán a dar mayor importancia a este aspecto. No sólo por la posibilidad de sanción por incumplimiento de algunas normas, sino porque se planteó la discusión de los aspectos ambientales de los puertos “, dijo.
Fuente: Confederación Nacional de Transporte. Traducción, Webpicking.com.