Entrevista a Marco Rangel, presidente de FPT Industrial (Grupo IVECO) para América Latina.

¿Qué es FPT Industrial, compañía que forma parte de Iveco Group?

Iveco Group está conformada por seis marcas independientes, con la visión de proveer las mejores soluciones dentro del contexto de motorización a todo el mercado. El grupo está presente desde hace 50 años en Argentina y tiene una planta de producción ubicada en Ferreyra, en Córdoba. La planta produce motores no solamente para el mercado argentino, sino también para exportación. En 2023 el grupo cumplió un año de operaciones independientes. Tenemos el orgullo de decir que tuvimos un año muy importante de consolidación de la marca. Y desde FPT Industrial, hoy somos el mayor exportador de motores de Argentina. Tenemos una experiencia que asciende a más de 150 años de tecnología y desarrollo de tecnologías de motores, de ejes y de transmisiones.

¿A qué tipo de máquinas están orientadas estos motores, además de los camiones?

Tenemos un portafolio de productos con una cobertura muy amplia y con un rango de potencia que va desde los 30 hp hasta 2.500 hp, en diversos rubros. El segmento más tradicional es el del transporte y la logística, conformado por camiones y vans, por ejemplo. También apuntamos al segmento de la maquinaria agrícola, en el que somos aliados de diversas marcas a nivel mundial. También hacemos foco en otras aplicaciones industriales. A su vez, en el mercado marítimo, tenemos generaciones de productos muy consistentes, con una participación en el mercado superior al 70% en Argentina. Estos motores todavía son producidos en nuestra casa matriz, en Italia.

¿En qué otros países de América del Sur tiene presencia FPT Industrial?

Tenemos una planta en Brasil, donde también tenemos nuestro centro técnico de desarrollo de tecnologías para motores. De todos modos, hacemos adaptaciones de nuestros motores en nuestro centro de desarrollo en Córdoba, donde hacemos prototipos de aplicaciones nuevas.

También tenemos oficinas en Brasil y en Buenos Aires. Y a esto se suma un centro de distribución en otra ciudad de Brasil y un depósito en las cercanías de Buenos Aires, desde donde atendemos a nuestra red de distribución para servicios y soporte al cliente.

¿Cuál es la visión de la compañía en el difícil contexto económico del país?

Tenemos experiencia en el mercado. Estamos presentes en la Argentina desde hace más de 50 años con la marca Iveco y, desde hace más de tres, con la marca FPT industrial. El contexto regional nos resulta conocido dentro del contexto industrial, con variabilidad y con incertidumbres, y a partir de nuestro conocimiento logramos manejarlo estratégicamente con equilibrio. Siempre hay preocupaciones sobre el próximo año y sobre cómo se plantean las perspectivas dentro del contexto económico, que en nuestra región tiene un vínculo fuerte con la política.

Estos mercados son muy importantes: el 15% de todas las ventas globales son efectuadas en la región. Además, tenemos la producción distribuida entre Argentina y Brasil y así podemos compensar caídas con producciones complementarias.

Actualmente, nuestra planta en Córdoba está enfocada en motores medianos y pesados, y la planta en Brasil, en motores medianos y livianos. Así, buscamos un equilibrio en la balanza de exportaciones e importaciones. Sabemos que los ciclos se alternan y tenemos siempre la visión de que la gestión debe ser manejada con la mayor flexibilidad posible.

A su vez, entendemos que la fortaleza de la región es la agricultura. Este año, por ejemplo, tenemos una cosecha muy importante en Brasil, con 14% de crecimiento, e impacto de la sequía en Argentina. Ambas se compensan dentro del contexto de producción de motores.

¿Cómo ven los próximos años? ¿Cuáles son sus proyecciones en materia de motores para energías alternativas?

Tenemos muchos proyectos e incluso hemos pasado la primera fase de la transición de control de emisiones para los motores que hacemos en Córdoba para exportación a Brasil. Esto requirió no solamente una inversión muy importante en desarrollo tecnológico, juntamente con nuestros clientes, sino también que la planta se adapte a la nueva tecnología.

Allí fabricamos la última generación de motores, que tienen un control de emisiones que asciende a los mismos niveles existentes en Europa. Tenemos la tranquilidad de decir que tenemos la última tecnología de productos fabricados en nuestra planta, tanto en Córdoba como en Brasil. Y también la seguridad de que estamos transitando hacia una armonización global desde el punto de vista de control de emisiones. Al momento, continuamos realizando inversiones dentro del cuadro de aceleración de producción en Córdoba, porque el mercado se configura con una transición.

Esto sigue por una ruta de motores a combustión tradicional a diésel: son motores para los que hoy tenemos tecnologías de punta ya aplicadas. Incluso en Europa estos fueron adaptados a la nueva norma Euro 7, lo que configura una nueva etapa en el control de emisiones.

En paralelo, atendemos a una tendencia de transición energética y nosotros, como líderes en el segmento de tecnología de energía, miramos a una matriz que llamamos multi combustible. Es decir, para nosotros, la transición energética no pasa solamente por una ruta: trabajamos con vistas hacia dos o tres años en un motor compatible con múltiples combustibles. Se trata de un motor con la tecnología de motor a combustión tradicional a diésel, pero también compatible con gas natural o renovable, como el biometano. También estamos enfocados en la combustión de hidrógeno, una nueva tecnología sobre la que estamos realizando pruebas en Europa. La misma arquitectura dentro del contexto de productos atiende a todas las características de los combustibles alternativos que tenemos en desarrollo.

En paralelo, nos enfocamos en la electrificación, que es la próxima etapa para los motores. Tenemos soluciones completas electrificadas. En algunos mercados se requiere una transición más rápida, por ejemplo en los livianos, que incluye al transporte urbano.

En el grupo, en conjunto con Nicola, Iveco desarrolló un camión que puede operar totalmente con baterías eléctricas. Se necesitan alrededor de 6 toneladas de baterías y cuatro horas de carga para operar el camión, lo cual hace que, posiblemente, este no sea aplicable en cualquier mercado. Puede ser utilizado para mercado específico, como una carga portuaria.

Como grupo, somos líderes en la producción de motores a gas natural a nivel mundial. Tenemos más de 70.000 motores en operaciones en el mundo, con tecnologías que atienden al mercado agrícola, de transporte y de buses, fundamentalmente.

Recientemente, inauguramos nuestra propia producción de baterías eléctricas para bienes de capital. Lanzamos la e-Daily, la versión eléctrica de nuestro ya tradicional vehículo. Algunos mercados lo recibirán como una gran ventaja: por ejemplo, aquellos en los que se estableció la prohibición de circulación nocturna de vehículos.

Desde FPT Industrial miramos todos los mercados, a fin de adecuarnos. Por ejemplo, en Argentina, entendemos que la transición pasa por una evolución en los motores a gas. Tenemos un portafolio de motores a gas disponible y los camiones Iveco ya fueron lanzados. Los buses también siguen la misma vía.

Tenemos reservas de gas, tenemos infraestructura y esto hace sentido. Los motores a gas natural generan un menor impacto y son más silenciosos. Nos parece una etapa intermedia hacia una transición completada para una electrificación.

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