El Gobierno argentino dispuso prorrogar hasta el 31 de diciembre de 2017 el tratamiento impositivo diferencial para la producción de biodiésel y la eximición de gravámenes al biodiésel empleado como combustible líquido en la generación de energía eléctrica.
Así lo estableció mediante el Decreto 1325/2016, publicado en el Boletín Oficial, que da continuidad a la política dispuesta a fines de diciembre pasado, “en el marco del papel trascendental que reviste para el país la incorporación de la energía renovable en la matriz energética nacional”.
“La incorporación de los biocombustibles a la matriz energética nacional continúa contribuyendo a cubrir las exigencias que plantea el incremento de la demanda de combustibles e impulsando el crecimiento del sector agropecuario y de las economías regionales con el agregado de valor a sus materias primas”, destaca.
Fuente: Agencia de noticias Télam.