Pese a los avatares de la economía, la demanda del mercado de oficinas se enfoca en las oportunidades. Según el último informe MarketBeat de Cushman & Wakefield, empresa global de servicios inmobiliarios corporativos, las empresas de primera línea buscan ubicarse en edificios de categoría premium con grandes superficies y plantas consecutivas, pero debido a la escasa disponibilidad, una gran parte de la superficie en construcción que puede satisfacer estos requerimientos, se ocupa antes de ingresar al mercado.
Lucas Desalvo, gerente de Market Research de la compañía, destaca al respecto: “La vacancia registrada al término del tercer trimestre fue del 6,4%, manteniendo así su tendencia descendente a lo largo del año y la superficie disponible es de 84.423 m2, un 5,5% menor que el trimestre anterior. Puerto Madero es el submercado que presenta el índice más alto de vacancia con un 11,5%, al que le siguen Nodo Panamericana – Gral. Paz con 9,8% y el Corredor Panamericana con 9,2%”.
Con respecto a los precios de alquiler promedio, en este período disminuyeron un 2,4% respecto del trimestre anterior, ubicándose en US$ 28,2 mensuales por m2 para la zona CBD (céntrica) y US$ 26,8 para la NON CBD (no céntrica).
El informe revela también que la absorción del trimestre se produjo con la finalización del edificio Blas Parera 51. La totalidad de este edificio, junto con la superficie disponible que había en Lumina Olivos, fueron alquilados por una empresa de coworking, aunque la real absorción vendrá dada por los futuros subinquilinos o mejor dichos las empresas usuarias de los espacios de coworking. Se prevé que ambos estén en funcionamiento hacia fines de año.
En cuanto a la superficie en proyecto, si bien está liderada por Catalinas – Plaza Roma y Nodo Panamericana – General Paz, el Corredor Libertador también se alza con un 20,8% del total, presentándose como un submercado con grandes desarrollos en proceso y un futuro prometedor que transformará el mercado de oficinas una vez que esté consolidado.
“Si se continúa con este ritmo de ocupación, se prevé que la vacancia se mantendrá estable a pesar de los nuevos ingresos de edificios, y la mayor expectativa está depositada en la superficie que se encuentra actualmente en proyecto. Por otro lado, el contexto económico y la vacancia de largo plazo en edificios con más antigüedad en el mercado podría derivar en la baja del precio de alquiler pedido”, analiza José Viñas, director de Brokerage de Cushman & Wakefield.
Para finalizar, el informe destaca que el mercado inmobiliario podría fortalecerse si la macroeconomía se estabiliza. Las oportunidades de mejora y perspectivas positivas en el corto plazo se reafirmarían luego de las elecciones presidenciales.
Fuente: Cushman & Wakefield.