Presentación ofrecida por Luis Niscovolos, secretario ejecutivo del Comité Intergubernamental de la Hidrovía, en el XI Encuentro Argentino de Transporte Fluvial, realizado por el Instituto de Desarrollo Regional (IDR), el 24 de abril de 2017 en Rosario, Argentina
La Hidrovía Paraguay – Paraná está en el foco de los gobiernos; no tengo la menor duda respecto de ello. Esto se evidencia en las manifestaciones precisas y claras por atender las necesidades de dotar a este instrumento de eficiencia, competitividad y seguridad, para constituirlo en una alternativa viable y permanente en el tiempo, en materia de transporte.
Este convencimiento no es solo del presidente de Argentina Mauricio Macri, sino que es compartido por otros mandatarios de la región, que han hecho manifestaciones muy puntuales sobre el tema.
En ocasiones, hablamos y analizamos los sistemas de navegación fluvial de la Unión Europea, Estados Unidos, Asia y China en particular, que tiene 110.000 km de vías navegables interiores. Si sumamos los kilómetros de vías navegables de los países que integran la Hidrovía -Brasil, Argentina, Bolivia, Uruguay y Paraguay-, vemos que son casi la mitad respecto del gigante asiático, pero tienen una gran ventaja: en su mayor parte, son favorecidos por condiciones naturales. Por el contrario, solo el 8% de las vías chinas permiten la navegación interior de buques con más de 500 toneladas.
Agenda de trabajo del Comité Intergubernamental de la Hidrovía Paraguay – Paraná
El Comité Intergubernamental de la Hidrovía Paraguay – Paraná está integrado por cinco países. Buscamos y alcanzamos un delicado equilibrio en la dinámica de las reuniones y en la fijación de políticas regulatorias. Desde la Comisión del Acuerdo –un organismo técnico de la CIH-, tenemos tres reuniones por delante en el año -en Asunción, La Paz y Brasilia- y ya realizamos una en abril en Buenos Aires, en la que trabajamos sobre temas vinculados concretamente con el desarrollo de mejores políticas para la navegacion fluvial.
¿Por qué realizamos las reuniones? Porque para poner en marcha los mecanismos institucionales, hay que desarrollar y encontrar soluciones de manera gradual y sistemática para los asuntos vinculados con la Hidrovía, y debemos dar continuidad a esos compromisos. La Hidrovía Paraguay – Paraná y las materias que la Comisión del Acuerdo aborda constituyen una parte del engranaje de la logística y del desempeño del comercio exterior, no solo de Argentina, sino de los demás países. Estos temas constituyen las agendas gubernamentales y tienen, por lo tanto, un ritmo gubernamental. Debemos poner en relieve que el tratamiento de las diferentes agendas de trabajo propuestas por los países es permanente y continuo, y se va gestionando en el tiempo.
Como dijo el gobernador de la provincia de Santa Fe, no podemos resolver las problemáticas en tres o cuatro años. Son problemáticas que hacen a la eficiencia, a la competitividad, a la seguridad, a la permanencia del empleo y a la rapidez logística, para que la carga se sienta atraída por el flujo fluvial de 3.400 km de la Hidrovía. Pero estamos trabajando en una buena dirección, desde el punto de vista institucional y gubernamental. Debemos ser prudentes y cautelosos, pero no debemos perder el ritmo, porque estamos construyendo resultados.
Podemos ya percibir resultados interesantes y avances concretos en temas que hacen a la navegación, a la seguridad, al control de ilícitos, al medio ambiente, al mejor funcionamiento interinstitucional, a la mejora de relacionamiento entre los organismos encargados de tomar las decisiones día a día y, rápidamente, respecto de situaciones que se plantean en la navegación fluvial. Las entidades de prefectura y aduana, por ejemplo, tienen que resolver asuntos inmediatamente y no pueden escapar de aquellos compromisos y formas establecidas en la reglamentación y en los acuerdos firmados por los países.
Hay sectores que no lo son o que cuestionan que ciertos estamentos no tienen la dinámica esperada o que no se atienen al trabajo en función de la realidad cotidiana de la navegación fluvial. Pero yo soy optimista, y discrepo de ese enfoque.
La reunión de la Comisión del Acuerdo, realizada recientemente en Buenos Aires, reunió a alrededor de 50 funcionarios, que desarrollaron una agenda de trabajo. Algunos de ellos trabajaron durante 48 horas, prácticamente sin interrupción.
Ejes de trabajo
Ya resolvimos satisfactoriamente las cuestiones vinculadas a las dimensiones máximas de los convoyes, temas que fueron repasados nuevamente en la reunión. Hay principios de acuerdo para que aquellas resoluciones que se tomaron meses atrás tengan continuidad y sean revisadas por los especialistas, para que las condiciones de eslora se correspondan con los niveles de potencia adecuados.
Apuntamos a trabajar para elevar el estándar de formación y de capacitación del personal que trabaja en los barcos remolcadores y en barcazas. Trabajamos para mejorar el vínculo ente las prefecturas, para que se garantice la aplicación de un criterio de seguridad que no entorpezca el funcionamiento y la fluidez del tránsito de las embarcaciones. Nos centramos también en agilizar los certificados sanitarios para que las mercaderías destinadas a exportaciones puedan transitar por la Hidrovía sin padecer detenciones ocasionadas por certificados provisorios.
Trabajamos en una revisión competa de la reglamentación de la Hidrovía, de los protocolos y de los reglamentos, y de aquellos aspectos establecidos sobre condiciones de igualdad de oportunidades para una mayor competitividad. A mi modo de ver, es un instrumento que hay que revisar íntegramente, hasta preguntarse si no habría que crear otro mecanismo con objetivos similares, pero adecuado a la realidad.
A partir de la enumeración de estos ejes de trabajo, quiero enfatizar lo siguiente: el objetivo de los países es trabajar por una Hidrovía más eficiente, competitiva y segura, desde el punto de vista de las atribuciones que les corresponden a los funcionarios gubernamentales que componen el organismo.
Trabajamos para reforzar las medidas asociadas al combate al tráfico de ilícitos y de personas. Por supuesto, estas son políticas permanentes y duraderas. El CIH puede subordinarse a la función de los organismos de seguridad, pero quiere hacerlo de manera coordinada y con medidas específicas, que sean aplicadas para combatir este flagelo, que cruza a la región, y al mundo. Y de la mano de organismos aduaneros, buscamos el mejoramiento en los documentos utilizados para el tránsito de mercaderías, con inspecciones navales extraordinarias.
Aunque se trate de organismos de naturaleza intergubernamental, siempre es bueno tener el insumo y el aporte de aquellos que están en el día a día, que puede ser un análisis de la situación o una identificación de los puntos primordiales que podrían ser objeto de tratamiento de la Comisión del Acuerdo del CIH. En ocasiones, es difícil obtener esa información. Por eso, hago un llamado y un pedido, para que los organismos contribuyan desde su lugar, no para superponer agendas, sino para alimentar la agenda con aquellas cuestiones específicas que cada uno de ellos conoce.
Perspectivas positivas
Estamos trabajando en temas estrechamente vinculados con la realidad. Tenemos la decisión absoluta de terminar de cerrar el acuerdo entre los cinco países y establecer definitivamente, a la mayor brevedad, la sede institucional de ICH y los organismos dependientes en Buenos Aires, tal como lo indican los instrumentos fundacionales.
Estamos en marcha. Estamos en movimiento. A veces, llevamos la dinámica que los actores le pueden dar. Administramos intereses y recursos, por lo que nuestra tarea no es fácil. Tenemos que transformar la Hidrovía para que no se convierta en un terreno de disputas regulatorias intersectoriales, sino en un instrumento válido y permanente, que permita mejorar la estructura logística y de transporte de los países de la región y, por lo tanto, contribuya a mejorar los estándares de comercio exterior.
El camino no está exento de dificultades, pero estamos avanzando, porque la Hidrovía está en el foco de los Gobiernos. Tengamos paciencia y avancemos juntos, porque hay mucho para ganar y podremos también mejorar la calidad de vida de las personas.
Para más información sobre el Comité Intergubernamental de la Hidrovía: http://www.hidrovia.org/
Realizado por webpicking.com en junio 2017