El presidente Alberto Fernández anunció que en los próximos días se lanzará la licitación pública para la construcción del Canal Magdalena. Se trata de una obra que conectará el sistema marítimo con el sistema fluvial argentino, y favorecerá la integración de puertos del país, agilizando las exportaciones y mejorando la conectividad fluviomarítima.

“En los próximos días lanzaremos la licitación pública para la construcción de la vía navegable Canal Magdalena, obra de dragado y balizamiento que le brindará al sur de la Provincia de Buenos Aires la posibilidad de exportar su producción de manera más eficiente con una salida directa a aguas profundas, y mejorará la conectividad fluviomarítima”, subrayó Fernández durante su discurso ante la apertura de sesiones ordinarias en el Congreso.

Además, entre las ventajas que implica el desarrollo del proyecto expresó que esta obra permitirá ahorrar tiempos de navegación de los buques que transitan por el sistema navegación troncal.

La construcción del Canal Magdalena es un proyecto presentado en julio de 2013 por el Gobierno nacional que busca transformar el cauce natural del lecho del Río de la Plata -que posee una profundidad de 4,50 metros-, y dragarlo hasta los 12 metros, lo que abriría una conexión directa entre los puertos fluviales y el litoral marítimo.

La traza prevista consistirá en un canal rectilíneo a desarrollarse entre la zona denominada El Codillo y el área de profundidades naturales conocida como Zona Beta.

El objetivo principal es facilitar la conectividad del transporte naviero mediante grandes embarcaciones entre los puertos marítimos argentinos con el puerto de la ciudad de Buenos Aires y los restantes puertos fluviales del país en la cuenca del Plata.

Actualmente, este cauce se encuentra ubicado al sur del Canal Punta Indio, y su nivel de profundidad actual impide que los buques lo utilicen como vía de acceso a los puertos del Río de la Plata, el Río Paraná y el Río Uruguay.

Esta situación genera que aquellos buques de bandera nacional que parten de un puerto fluvial argentino hacia otro del litoral marítimo argentino deben pasar por aguas de uso común, cuyo tráfico lo administra Uruguay.

A fines de marzo 2021, la Subsecretaría de Puertos, la Cancillería y el Servicio de Hidrografía Naval de la Argentina fondearon una boya en el kilómetro 200,800, en el inicio del Canal Magdalena, estableciendo una señal de aguas seguras o de recalada, para su navegación con calados compatibles con sus profundidades naturales.

Esta obra es parte de un proyecto mayor, que busca adaptar tanto las vías navegables (el ancho y la profundidad) como la infraestructura portuaria argentina (dársenas, calados, etc.) a las necesidades operativas de los barcos de mayor tamaño en el transporte marítimo de cargas.

Por último, la construcción del Canal Magdalena mejoraría los tiempos de navegación absolutos “entre 4% y 10% para el tráfico del norte”, y “80% para el tráfico del sur”, y generaría al sistema de navegación nacional “entre US$ 85 millones y US$ 89 millones de ahorro anual”, según especialistas.