CIMALSA, empresa pública de la Generalitat de Catalunya que promueve, desarrolla y gestiona infraestructuras y centrales para el transporte de mercancías, la logística y la movilidad, presentó las conclusiones del Plan de Impulso y Modernización de los sectores Industriales y Logísticos en Catalunya (PILOG). Fue en el marco del Salón Internacional de la Logística y durante la VIII Jornada Smart Logistics,
A través del PILOG, CIMALSA desarrolló una metodología para conocer en profundidad el estado de los sectores industriales y logísticos de Cataluña y clasificarlos en cinco grandes categorías de acuerdo con su grado de calidad. Así, a través del Plan, se incide en la apuesta por la reutilización y reciclaje como base del crecimiento de la oferta de suelo para la actividad económica.
Principales puntos del informe
Las conclusiones apuntan que, de los más de 1.400 polígonos de actividad económica del país, un 70% cuentan con buenas condiciones que les permiten ser más competitivos para las empresas. Estos polígonos se encuentran repartidos de forma heterogénea, con Lleida, Tarragona y Barcelona con el mayor peso relativo.
Un 13% de los polígonos dispone de suministros básicos, servicios de telecomunicaciones y niveles adecuados de accesibilidad o señalización y un 14% tienen la necesidad de regenerarse. En este último caso, realizar actuaciones de urbanización o de accesibilidad les permitiría ser más competitivos y representan, pues, una oportunidad para su impulso y, en definitiva, para atraer nuevas inversiones. Aunque la mayor parte se sitúan en Barcelona, la demarcación con mayor incidencia es Girona.
El análisis ha detectado, además, que tan sólo un 2% de los polígonos se encuentran en fase de desarrollo estratégico o no se han edificado. La mayor parte se encuentra en la demarcación de Barcelona, pero la mayor proporción se sitúa en Tarragona.
La visión de las autoridades
El secretario de Territori i Mobilitat, Isidre Gavin, indicó durante la presentación que “Catalunya, un país con una fuerte sensibilidad ambiental y con un Govern con una fuerte responsabilidad ambiental, debe apostar por el reaprovechamiento de suelo logístico para plantear el crecimiento de la oferta de nuevo suelo de actividad económica”. Señaló, además: “En Catalunya tenemos más de 3.000ha brutas de suelo de actividad económica, tanto de operadores públicos como privados. Debemos hacer un gran esfuerzo para dar respuesta a las necesidades de la actividad económica que debe ir acompañado del reaprovechamiento, el reciclaje y la reutilización de algunos sectores que no son eficientes. Es imprescindible realizar una gestión eficiente y tener una visión estratégica de la gestión del suelo”.
Por su parte, el presidente de CIMALSA, Enric Ticó, manifestó que “en Catalunya ha habido una buena planificación urbanística, tanto por parte de la Generalitat de Catalunya como de los Ayuntamientos. Tenemos suelo logístico, industrial y de servicios en el mercado o planeado que es suficiente para cubrir las necesidades actuales y futuras del sector”.
Ticó añadió que “hay que poner la lupa en el 2% polígonos que suponen una nueva oportunidad. Habrá que prestar atención a las actuaciones de empresas, administración y ciudadanos y cuáles son las oportunidades de inversión”. “Los mejores polígonos son los que tienen la mejor gestión y, con ello, conseguiremos un beneficio público: tener polígonos bien gestionados y con más servicios acaba siendo un ahorro para todos”.
La directora corporativa de CIMALSA, Fina Jarque, afirmó que “es clave para administraciones y para todo el sector disponer de un sistema de información dinámico que, con datos y criterios objetivos y con la aportación de agentes públicos y privados, nos permite conocer el estado de los sectores económicos del país. Hoy, con el centenar de indicadores del PILOG, esto es posible”.
El PILOG permite, además, monitorizar la calidad de los sectores industriales y logísticos y conocer el atractivo actual de los sectores en Cataluña para captar inversión identificando las oportunidades de disponibilidad de suelo. Además, tiene la voluntad de aportar un marco de decisión objetivo para el diseño de políticas de reindustrialización y mejora de los entornos industriales y logísticos y ofrecer datos e indicadores a los agentes del sector para promover la colaboración público-privada y mejorar la gobernanza de los espacios industriales y logísticos.