El Canal de Panamá anunció que inició el proceso de descarbonización de sus operaciones, con el objetivo de convertirse en carbono neutral para el año 2030.
De acuerdo con las autoridades, el Canal de Panamá contribuyó a una reducción de más de 13 millones de toneladas equivalentes de CO2 en 2020, al ofrecer una ruta más corta para los barcos en comparación con los trayectos alternativos más probables. Pero más aún, reconocen la importancia de hacer que su propia operación sea carbono neutral al final de la década.
Para iniciar la transición hacia un Canal más verde, la vía interoceánica incorporó cuatro automóviles eléctricos. Esto forma parte de un proyecto piloto para recolectar suficiente data con miras a migrar su flota hacia vehículos que no utilicen combustibles fósiles.
Parte de su plan estratégico de descarbonización también incluye remolcadores y lanchas que utilicen combustibles alternativos. Además, el reemplazo de los procesos de producción de electricidad a favor de plantas fotovoltaicas, el uso de energía hidráulica y asegurar que todas las instalaciones y proyectos de infraestructura sean ambientalmente responsables y sostenibles.
El Canal de Panamá primero comenzó a medir su huella de carbono en 2013 para alinear sus acciones con los objetivos globales de reducir las emisiones para mitigar y adaptarse al cambio climático. Su plan de convertirse en carbono neutral continuó en 2017 con el lanzamiento de su Calculadora de Emisiones, una herramienta que no solo permite a los operadores medir sus emisiones de gas de efecto invernadero (GEI) por ruta, sino también fortalecer el análisis del Canal sobre las emisiones producidas por sus operaciones diarias.
Para reducir su propio impacto, el Canal de Panamá también ha tomado medidas en búsqueda de maximizar su eficiencia operativa y ambiental, implementando acciones de conservación del agua y optimizando el tránsito.
A través de la Ventana Única Marítima de Panamá (VUMPA) se ha mejorado la eficiencia y huella de carbono de procedimientos de transbordo al agilizar el papeleo logístico para clientes internacionales transitando por el país, ahorrando hasta 3,260 horas y más de 300,000 formularios impresos al año.
La vía interoceánica también firmó el 22 de abril la Declaratoria de “Las Primeras 50 Organizaciones Carbono-Neutro”, una iniciativa liderada por el Ministerio de Ambiente de Panamá (MiAmbiente) encaminada a integrar esfuerzos para acelerar acciones climáticas y medibles con miras a alcanzar la neutralidad de carbono en el año 2050, aunque el Canal se ha puesto la meta de lograrlo antes de finalizar esta década.
Como parte de la nueva iniciativa nacional, el Canal de Panamá desarrollará un inventario anual de GEI, así como un plan de acción con objetivos medibles para reducir sus emisiones. Los esfuerzos del Canal serán tenidos en cuenta como parte de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por su sigla en inglés), establecida por la Convención Marco De Las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, en cumplimiento del Acuerdo de París.
El valor de la Ruta Verde
A través del Programa de Reconocimiento Ambiental “Green Connection”, la vía interoceánica ofrece el Green Connection y el Environmental Premium Ranking (EPR). Estos destacan a clientes que demuestran un excelente rol de administración ambiental, incluyendo el uso de combustibles bajos en carbono y rutas ambientales conscientes, brindándole cupos prioritarios.
Como una mejora a este programa, el Canal de Panamá analiza tomar en cuenta en su estrategia de precios dinámicos la tecnología de los buques y su huella de carbono, lo que los hace más eficiente durante el tránsito.