Al cierre del 2016, el Canal de Panamá cumple un nuevo aniversario, con el reto de aumentar el valor de la ruta para generar mayores beneficios al país y ofrecer un mejor servicio a sus clientes.
“Los panameños hemos logrado mucho durante estos 17 años: reafirmamos nuestra capacidad para administrarlo, en nuestra primera decisión soberana sobre el Canal, dijimos sí a su ampliación, y luego superamos los retos que nos permitieron inaugurar en junio pasado Canal Ampliado”, expresó el administrador del Canal de Panamá, Jorge Luis Quijano.
A partir de su transferencia al mediodía del 31 de diciembre de 1999, el Canal de Panamá inició una etapa de modernización con el fin de cumplir con su enfoque de ofrecer un servicio seguro y confiable a sus clientes, a través de una operación rentable que contribuya al desarrollo del país.
Administración panameña
En manos panameñas, el Canal de Panamá reestructuró su sistema de peajes con el cambio del modelo de negocio, aproximando el valor de la ruta con el coste económico que esta debe tener, y luego expandió el negocio mediante la construcción del tercer juego de esclusas, el mayor proyecto que ha emprendido la vía interoceánica desde su inauguración en 1914.
Su negocio está basado en un modelo de gestión pública consensuado por diferentes sectores de la sociedad nacional previo a la reversión de 1999. Solo al cierre del año fiscal 2016, que terminó el pasado 30 de septiembre, el Canal de Panamá registró el tercer mejor comportamiento de su historia, con 330.7 millones de toneladas de capacidad de carga, en medio de un año con disminuciones para el crecimiento del comercio mundial y la industria marítima.
En diciembre, el Canal de Panamá cumplió su compromiso anual al Tesoro Nacional, esta vez con un aporte directo de B/. 1,013.1 millones, lo que eleva a más B/. 11,600 millones las contribuciones en 17 años de administración panameña de la vía interoceánica.
El Canal ampliado
La semana anterior, se cumplieron seis meses de operaciones del Canal de Panamá ampliado, y fueron superadas las expectativas para este período. Para el próximo 31 de diciembre, se estima que las nuevas esclusas habrán registrado alrededor de 600 tránsitos de buques neopanamax.
Más del 50% de ellos corresponde a buques portacontenedores, seguido de barcos de Gas Licuado de Petróleo (LPG) y de Gas Natural Licuado (GNL). Este último segmento de mercado surge del producto de las ventajas que ofrecen las nuevas esclusas en cuanto a dimensión se refieren. Para el 2017 se anticipa el paso de los primeros cruceros con dimensiones neopanamax.
“El impacto mundial del Canal Ampliado ya es evidente. Hasta el momento, 10 servicios de línea neopanamax han sido redirigidos a la vía acuática reconociendo el valor de la ruta. Los puertos de la costa este de los Estados Unidos, por ejemplo, continúan invirtiendo en grandes mejoras de infraestructura para acomodar los buques más grandes y el volumen de mercancías facilitada por el Canal ampliado”, indicó Quijano.
Aumentar el valor de la ruta
Durante el 2017 el Canal de Panamá continuará su estrategia de incrementar el valor de la ruta mediante la consolidación del funcionamiento del Canal ampliado y la diversificación de su negocio con actividades complementarias a la operación de la vía interoceánica para continuar la generación de mayores beneficios al país.
Para ello, está en marcha la licitación pública donde cuatro empresas precalificadas participan para la construcción y operación de un puerto de contenedores en Corozal, en la ribera este de la entrada del Canal en el Pacífico. El proceso se encuentra en la fase de homologación con miras a recibir las propuestas económicas en febrero próximo.
Fuente: Autoridad del Canal de Panamá.