La presencia de las mujeres en la industria tecnológica sigue siendo una materia pendiente para el sector. Sin embargo, el panorama es alentador porque la brecha se está achicando. En los últimos cuatro años, la participación de mujeres en el total de postulaciones de Tecnología osciló entre el 19,8% y 36,8%, y se consolidó la tendencia positiva a lo largo de los últimos años.
Si bien no se ha alcanzado la paridad de género en el mercado, se incrementó un 32% la participación de feminidades en roles estratégicos en América latina, según datos de la organización Mujeres en Tecnología (MET). Cada vez son más las mujeres que se suman al ámbito de la tecnología frente a la alta oferta laboral en el sector, por lo que las empresas buscan perfiles capacitados y con habilidades de liderazgo para ocupar cargos específicos.
En ese marco, Avancargo, plataforma de logística 3.0 que conecta a dadores de carga con transportistas, anunció una nueva alianza estratégica junto a ADA ITW, con el fin de crear sinergias poderosas que beneficien a todas las mujeres involucradas en el sector IT.
ADA es una organización no gubernamental que se especializa en la formación y capacitación de mujeres en programación y tecnología, tanto en Argentina como en el mundo de habla hispana. Con este nuevo acuerdo en el ámbito de la logística, ambas organizaciones se unen para llevar a cabo diversas acciones que fortalecerán tanto a Avancargo como a la comunidad en general.
Así, un grupo de egresadas de la capacitación de ADA tendrá acceso a prácticas profesionales significativas dentro de Avancargo, lo que implica una oportunidad para aplicar sus conocimientos en entornos reales con equipos reales. Además, a través de esta alianza, la startup facilitará la contratación de perfiles de mujeres y femineidades calificadas, para que puedan insertarse en el mercado laboral con mayor facilidad.
“Estamos en la interacción de dos industrias que, tradicionalmente, son muy masculinas: el transporte y la tecnología. Dos nichos en los cuales es muy difícil encontrar mujeres. Y ADA viene a ayudarnos desde el lado de la tecnología”, plantea Pablo Mendonça, CMO y cofundador de Avancargo.
ADA tiene el fin de promover y fomentar el empoderamiento de mujeres a través de su formación en tecnología, con el propósito de mejorar su calidad de vida e impulsar su autonomía, cooperando en la creación de oportunidades de inserción laboral. Las prácticas profesionales permitirán integrar los contenidos formativos de las capacitaciones de ADA en un contexto real donde su profesión se desarrolla. Además, cada egresada contará con el acompañamiento de un mentor de Avancargo.
Abriendo puertas
Aunque el mercado celebra los avances, lo cierto es que aún persisten las desigualdades estructurales que hacen que las mujeres y diversidades se concentren en puestos subvalorados y de menores salarios en la industria de IT.
Según datos de MET, el 32% de las mujeres y diversidades tiene más dificultades para el acceso a puestos de liderazgo, mientras que los varones casi no manifestaron sufrir está problemática (2%).
Además, hay otros datos alarmantes. El 80% de las mujeres y diversidades que trabaja en el ecosistema tecnológico experimentó, alguna vez, situaciones de discriminación, violencia y acoso en el trabajo y lo atribuye a su género. Las personas encuestadas indicaron haber vivido al menos una situación de violencia y el 80% lo atribuyó a su identidad de género o sexual. Las situaciones que describen van desde el descrédito y el menosprecio a sus contribuciones hasta el sexismo, discriminación o acoso sexual.
Desde las empresas cabe, entonces, preguntarse de qué manera se puede revertir esta realidad y cómo trazar un plan de acción con políticas concretas para dar respuesta a la baja representación de mujeres en la industria.
“En el trabajo que hacemos con Avancargo, el modelo de diversidad e inclusión está soportado en un modelo abierto de reclutamiento, que tiene como objetivo encontrar buenos perfiles abriendo búsquedas en ecosistemas donde antes no estaban buscando. Estamos abriendo canillas que antes estaban cerradas. ADA es una de ellas. De esta forma, logramos que vengan perfiles que no son los típicos perfiles del mercado”, propone Tarcisio Mülek, emprendedor de impacto y consultor en desarrollo sostenible.
En el camino hacia lograr compañías más diversas no hay una misma hoja de ruta para todas, pero sí hay prácticas que pueden contribuir hacia una solución compartida. En el caso de Avancargo, en 2023 se formó un Equipo de Diversidad e Inclusión multidisciplinario y voluntario, integrado por miembros de diferentes áreas y locaciones de la empresa, con el fin de contribuir a pensar soluciones en esta materia. De esa experiencia surgió la idea de juntar sinergias con ADA.
“Lo interesante de esto, y es lo que hizo que todos nosotros nos sumemos, es la posibilidad de que estas políticas sean abiertas y hechas por los mismos empleados de la empresa. En este camino nos empezamos a hacer preguntas como qué tan inclusivos somos y cuál es nuestra realidad hoy. De esos temas vimos que había una oportunidad de mejora en la relación de cantidad de mujeres y decidimos trabajar con alguna entidad que sumara impacto positivo en esa búsqueda”, pone en primera persona Jorgelina Arias, Head de Carrier Compliance de Avancargo.
Reskilling y upskilling: una nueva oportunidad
Una de las virtudes de la industria IT es que abre la posibilidad de reinvención para todo tipo de perfiles. Sin importar la carrera, el background o incluso la edad, las capacitaciones pueden abrir posibilidades nuevas a un sinfín de personas. Aquí entran en juego dos conceptos clave: reskilling y upskilling.
El Foro Económico Mundial (FEM) estima que para 2025 el 50% de los trabajadores a nivel global necesitará mejorar o adquirir nuevas habilidades para mantenerse vigente en un ecosistema cada vez más desafiante. El reskilling refiere a la capacidad de adaptar los conocimientos a la realidad actual, mientras que el upskilling busca enseñar a un trabajador nuevas competencias para optimizar su desempeño.
“Tenemos una comunidad muy heterogénea, como son personas de más de 45 o 50 años que se están transformando en su carrera profesional, porque vienen de ser diseñadoras gráficas, abogadas o educadoras, por ejemplo. También tenemos personas que nunca han tenido alguna profesión específica, o que se dedicaron a ser amas de casa, y hoy encuentran una oportunidad en ADA para poder desarrollarse profesionalmente”, menciona Verónica Heredia, responsable de Inserción Laboral de ADA.
La organización permite a las mujeres a formarse en desarrollo Front End, desarrollo Back End, QA testing, UX / UI design y Python. Además, a través de las prácticas profesionales –que tienen una duración de entre uno y dos meses, con cuatro horas de trabajo diarias-, pueden conocer los entornos de trabajo y la cultura de las compañías. Incluso, si la experiencia es buena, se abre la posibilidad de que sean contratadas por la empresa.
En Avancargo ya están trabajando en las prácticas de cuatro mujeres. La firma, cuya nómina cuenta con un 27% de representación femenina, está en camino a duplicar su equipo en 2024, por lo que pronto anunciará nuevas contrataciones. Las necesidades específicas de IT estarán relacionadas con especialistas en Front End, Back End, UI y UX. Además, se abrirán oportunidades laborales en los equipos de Operaciones, Marketing, Administración y Comercial.