La Administración General de Puertos (AGP) avanzó con una serie de acuerdos con las distintas terminales que operan en Puerto Buenos Aires, en busca de consolidar el Master Plan proyectado por los equipos técnicos de la AGP, el cual consiste en la operación de dos terminales, tal como estableció el decreto 299/2023 del Ministerio de Transporte.
Este entendimiento, que garantiza las fuentes laborales, se logró a partir de la constitución de mesas de diálogo entre las autoridades de AGP, los dirigentes sindicales portuarios y los representantes de las tres empresas concesionarias. El mismo se dio de común acuerdo entre todas las partes, y ante la salida de BACTSSA, se definió que parte de ese espacio se reconvierta en una nueva plazoleta que permita una mayor operación de carga de contenedores.
El Master Plan diseñado por AGP se constituyó a través de diversos estudios realizados por los profesionales del organismo, que definieron que, para las condiciones de mercado actual, lo más adecuado es operar el Puerto bajo un esquema de dos terminales. De esta manera, queda despejado el escenario de cara a la futura licitación de dos terminales (Interior y Exterior) que permitirán la proyección a futuro del histórico Puerto Buenos Aires.
Los 450 trabajadores de la saliente concesionaria (BACTSSA) se incorporarán en las dos terminales que seguirán operando en el Puerto. De esta manera, se cumple otro de los puntos principales del decreto 299/2023 –que definió los términos de la nueva licitación- al asegurar la continuidad de los empleados en sus puestos.
A su vez, mediante la resolución 502/2023 del Ministerio de Transporte, se establecieron los términos contractuales de las dos terminales que continuarán operando hasta mayo del año 2027, con la posibilidad de tres años más de extensión. Mientras tanto, la AGP realizará un conjunto de obras estratégicas en el Puerto que permitirán el diseño de una nueva licitación, entre las cuales se encuentra el cierre de la Dársena D.
Asimismo, AGP avanza también con las obras de infraestructura clave para el nuevo esquema, como la consolidación de nuevas áreas operativas en el sector de Dársena F, tareas de ampliación en la Zona de Apoyo Portuario (ZAP) donde operan los camiones que ingresan al Puerto, y puesta en valor en el sistema ferroviario para lograr una operatoria que no necesite salir con las formaciones fuera de la jurisdicción portuaria, fomentando la intermodalidad, generando una mayor seguridad operativa y menores tiempos logísticos.