El Departamento de Ingeniería Química y Bioprocesos de la Universidad Católica (UC), presentó los resultados de las primeras pruebas chilenas de biodiesel de microalgas en motores diésel de alta cilindrada, como los usados por buses del Transantiago y camiones.
Las mediciones realizadas en conjunto con expertos de Mecánica Automotriz del Duoc UC y un grupo de tesistas del Laboratorio de Energías Renovables y Residuos de Ingeniería UC, arrojaron una reducción de emisiones de gases y de material particulado de hasta un 80% en vehículos diésel.
“Algunas especies de microalgas pueden acumular una gran cantidad de aceites, cuyo origen es la fijación de dióxido de carbono (CO2) de la atmósfera. Estos pueden utilizarse para producir biodiesel de manera similar al biocombustible que se produce con aceites usados en frituras”, explicó César Sáez, académico de Ingeniería UC que lidera el proyecto.
En las pruebas efectuadas en motores diésel, el ingeniero precisó que las microalgas demostraron ser una alternativa técnicamente factible para reducir los contaminantes de los buses del Transantiago, así como de los vehículos pesados.
“Nuestro actual desafío es lograr un escalamiento efectivo de tecnologías de producción de microalgas para este y otros fines. En eso estamos trabajando”, destacó Sáez.
Considerando el carácter renovable de los biocombustibles, los investigadores decidieron también producir biodiesel a partir de aceites usados en frituras. “Este producto lo mezclamos con diésel convencional y obtuvimos muy buenos resultados, similares a los ensayos con microalgas y sin realizar ningún cambio en la mecánica del motor”, adelantó el experto.
Agregó que los beneficios de usar biodiesel mezclado con diésel incluyen una reducción de todas las emisiones de los vehículos petroleros, a excepción de los óxidos de nitrógeno que pueden aumentar ligeramente. Sin embargo, dijo, algunos modelos incorporan un sistema catalítico para transformar y eliminar dicho contaminante.
Para los investigadores, el uso de estos recursos constituye un enorme potencial para el país, en especial la utilización de microalgas, por la gran variedad de especies de agua dulce y salada que existen en los ambientes naturales en Chile.
“El uso de microalgas como fuente de combustibles renovables en Chile, sólo se ve impedido por la falta de desarrollo de sistemas de cultivos a gran escala y de muy bajo costo, que utilicen además poca agua y energía”, añadió el profesor.
Las microalgas se encuentran en mantos acuíferos de agua dulce, salada e incluso en aguas residuales. Estas pueden cultivarse en mar, tierra adentro, en el desierto, zonas semiáridas y hasta en ciudades empleando la tecnología apropiada.
Dichos microorganismos son materia prima para la producción de muchos compuestos químicos que requiere la vida moderna, entre ellos proteínas, aceites, vitaminas, ácidos grasos omega y antioxidantes.
Fuente: Universidad Católica.