La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) presentó un informe, en el cual detalla que en 2015, la actividad portuaria creció 1,7%, con un volumen aproximado de 48 millones de TEU.
El documento “Reflexiones sobre el futuro de los puertos” ofrece un análisis sobre el futuro de los puertos de contenedores. Es una versión preliminar, que será sometida a la lectura y opinión de los expertos de la región, de tal manera que pueda ser perfeccionada a partir de los comentarios recibidos. El objetivo del documento es promover la reflexión sobre el tema del futuro de los puertos. La primera pregunta relevante, en tal contexto, es la siguiente: ¿qué y cuándo es el futuro?
De acuerdo con la CEPAL, la pregunta no es retórica. Por el contrario, es particularmente relevante -entre otros aspectos- según el momento de formularla. Veinte años atrás, los puertos latinoamericanos estaban ocupados con problemas tan concretos como la incorporación de las grúas pórtico, el diseño operativo de patios y procesos técnicos o la organización de las Asociaciones Público-Privadas y de una nueva era de las autoridades portuarias. Si se había hecho la pregunta en aquella ocasión, posiblemente la respuesta habría estado orientada a esos grandes desafíos del momento. Si la pregunta hubiera sido hecha entre cinco y 10 años atrás, el escenario del futuro sería aquel en que las principales arterias ya estarían expandidas (canal de Panamá y canal de Suez), los barcos más grandes jamás imaginados estarían ya navegando, o estaríamos frente a unos enormes conglomerados corporativos.
En resumen: el futuro es hoy. Aquellas cosas que definían el “futuro” cinco o diez años atrás, ya están ocurriendo. Finalmente, al formularse ahora, también se podría encontrar más de una forma de hacerle frente. Entre esas alternativas, puede tomarse el camino de responder sobre el futuro más cercano o sobre un futuro más distante.
Fuente: Comisión Económica para América Latina y el Caribe.