El Instituto Tecnológico del Embalaje, Transporte y Logística (ITENE) lanza una guía para resolver problemas como las entregas fallidas y la contaminación y restricción de acceso en las ciudades. Forma parte de los resultados del proyecto Transporta-T, cofinanciado por el IVACE de la Generalitat Valenciana y los fondos FEDER de la Unión Europea.

Costes de entrega altos, restricciones de acceso en las ciudades, entregas fallidas (exactamente un 20%), fragmentación de operadores (especialización, tamaño y despliegue), etc. Éstos son algunos de los problemas a los que diferentes agentes de la cadena logística tienen que hacer frente en la logística de última milla.

Para afrontarlos de manera óptima, ITENE ha identificado diversas medidas a adoptar por los diferentes agentes, contemplando para cada una de ellas los beneficios, el impacto, la dificultad, la replicabilidad y la problemática que resuelve cada medida, como principales parámetros.

En este ámbito, se han considerado acciones a adoptar por las administraciones locales, como la introducción de carriles multiuso, cuyo objetivo es mejorar la circulación y optimizar el trasporte de mercancías, una medida que ya ha sido introducida en Barcelona y Bilbao y que también persigue resolver problemas recientes como la contaminación y la restricción de acceso en las ciudades.

Asimismo, también se han considerado medidas a implantar por los propios operadores logísticos, como son la modernización de la flota de vehículos, el establecimiento de puntos de conveniencia o sistemas de optimización de rutas. Igualmente, se contemplan acciones basadas en modelos de economía colaborativa, como compartir vehículos para transporte particular de mercancías.

Toda la información al respecto está el Manual de Buenas Prácticas para la optimización de la logística de última milla, que forma parte de los resultados del proyecto Transporta-T. Este trabajo busca ampliar el conocimiento en el desarrollo de redes y modelos de transporte inteligentes, sostenibles e integrados, en línea con las políticas estratégicas en la materia adoptadas por las diferentes administraciones públicas.

Además, plantea tres ejes de actividad independientes, que representan oportunidades de negocio en el sector transporte y logística de la Comunitat Valenciana. Por un lado, el establecimiento de Modelos colaborativos asociados a la logística de la última milla y a servicios de devoluciones de compras a domicilio.

Transporta-T

El proyecto también aborda las tecnologías y modelos de desarrollo para potenciar el uso del ferrocarril para el transporte de mercancías en el Corredor Mediterráneo. Y finalmente, trabaja en la definición de tecnologías clave para la implantación del vehículo eléctrico (VE) y autónomo en el uso cotidiano.

Este proyecto está cofinanciado por IVACE, Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial de la Generalitat Valenciana, a través de los Fondos europeos FEDER de Desarrollo Regional, en el marco del programa de ayudas dirigidas a centros tecnológicos 2017 con el expediente IMDEEA/2017/131

La guía se puede descargar accediendo a la web del proyecto.

Fuente: Instituto Tecnológico del Embalaje, Transporte y Logística.